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#522 ¿Las dificultades del Antiguo Testamento deberían ser un obstáculo para creer en el cristianismo?

March 25, 2017
Q

Estimado Dr. Craig,

Soy un gran admirador suyo a pesar de que soy un teísta no religioso. Para hacer una declaración total: nunca he podido tomar el ateísmo en serio y estoy convencido por bases puramente filosóficas de que la cosmovisión atea está consignada a un absurdo lógico. Habiendo dicho eso, nunca he podido traerme a suscribirme de todo corazón a alguna religión, y eso se debe a una variedad de diferentes razones que dependen de la religión en discusión. Sin embargo, puesto que usted es cristiano, me limitaré a la razón principal por la que no puedo traerme a aceptar el cristianismo, para la cual todavía no he recibido una respuesta satisfactoria. Me imagino que si no voy a obtener una respuesta convincente de parte del Dr. William Lane Craig, entonces es muy probable que dicha respuesta no está disponible por lo menos por ahora.

La raíz de mi problema con el cristianismo (y con todas las religiones que descienden de Abraham) va de regreso a varios relatos del Antiguo Testamento, en particular al libro Génesis. He escuchado todas las 21 partes de la serie de la clase Defenders [Defensores] sobre la Doctrina de la Creación. Sin embargo, cuando leo todo el libro del Génesis (como lo he hecho muchas veces), basado en los diversos análisis exegéticos que he revisado de los relatos de Génesis, se me hace muy difícil evitar la necesidad de tener que hacer una interpretación literal.

Los primeros dos capítulos que tratan con el relato de la creación—primero del mundo entero, luego del hombre—parecen permitir una dimensión para una hermenéutica no-literal, pero aun así, eso me deja con toda la historia salvaje del arca de Noé y el Diluvio, la desordenada expectativa de vida de los primeros hombres que, por alguna razón, disminuyó con cada generación, por no mencionar las referencias a la existencia de gigantes y los relatos de mujeres copulando con espíritus malignos (Génesis 6:4), entre muchas otras cosas que no tengo dudas de que usted ya está consciente. Esos relatos incorporan un lenguaje muy específico y no parecen prestarse a una interpretación figurativa.

Sé que yo podría dejar de lado la creencia en la Inerrancia de la Biblia, lo cual es lo que usted usualmente les propone a aquellos que, como yo, han confrontado ese obstáculo para llegar a la fe en Cristo. Sin embargo, si concedo que el libro del Génesis en su totalidad (o una gran parte de él) no es verdadero, entonces eso me deja con el incómodo hecho de que Jesucristo—la deidad a la le que debo mi lealtad—en más de una ocasión afirmó esos errores como verdades (Lucas 17:26, Marcos 10: 6-9, Mateo 19: 4-5). Me apresuro a añadir que Pablo en sus cartas reitera muchas de esas afirmaciones. La única manera en que me parece que uno puede resolver ese problema es diciendo que Cristo afirmó esas verdades en un "sentido metafórico", pero considero esa justificación insatisfactoria, principalmente porque la interpretación más razonable de las palabras de Jesús es que él realmente creyó que esos acontecimientos eran literalmente verdaderos. Si usted dice que los escritores de los evangelios citaron mal a Jesús en todos esos aspectos, entonces eso plantea la pregunta de en cuáles otras cosas podrían ellos haberse equivocado. No hay necesidad de decir que eso le pega directamente al corazón de la Biblia en su totalidad.

Ahora bien, su respuesta a esto probablemente sería de que nada de lo que he dicho anteriormente le resta a su caso histórico de la resurrección de Jesús. Eso es verdad, aunque eso también significa que me quedo con este argumento, con un acontecimiento que supuestamente tuvo lugar hace 2000 años, sobre el cual se pone todo el fundamento racional de mi fe cristiana. Esa es una carga racional tremendamente pesada que llevar por un solo argumento. Sin embargo, incluso [si] yo debía reconocer que Jesús resucitó de entre los muertos, me parece que no estoy en posición de saber con certeza lo que Dios quiere de mí, ya que su repositorio para la verdad está, en efecto, fundamentalmente contaminado y, por lo tanto, no puede ser confiado. Así pues, aquí están mis dos preguntas para usted:

1. Si rechazo la Inerrancia de la Biblia, ¿qué uso tiene la Biblia para mí como cristiano? Para ser más específico, ¿qué referente epistemológico me queda para determinar si ciertos aspectos de mi potencial fe cristiana son verdaderos o falsos? ¿Debo quedarme nada más con la voz de la conciencia? Si es así, eso no parece ser una posición muy diferente a la que me encuentro en este momento.

2. En segundo lugar, ¿cuál es su posición sobre los otros relatos en Génesis además del relato de la creación? En particular, estoy interesado en saber qué usted piensa sobre Noé y el Diluvio, ya que no creo que usted haya abordado esa pregunta directamente.

No deseo nada más si no que usted resuelva este enigma para mí, ya que tengo una afinidad muy especial con la figura de Cristo y no quiero nada más que creer que él es verdadero. Muchos de mis amigos y conocidos no religiosos se han confrontado con ese mismo problema con respecto al cristianismo, y no me gustaría nada más que poder referirlos a una respuesta convincente.

Dios le bendiga,

Jon

Malta

  • Malta

Dr. Craig

Dr. craig’s response


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Cuando las personas me preguntan qué preguntas sin respuesta todavía tengo, les digo: "No sé qué hacer con esos relatos del Antiguo Testamento sobre Noé y el arca, la Torre de Babel, etc.". Así que me encuentro en la misma situación que tú, Jon. No tengo ninguna respuesta buena de cómo resolver esos problemas. Sin embargo, esas dificultades sin respuesta no me han impedido de venir o de abandonar la fe cristiana. ¿Por qué no?

Pues bien, una gran parte de la razón, como observas, es que la verdad de lo que C. S. Lewis llamó "mero cristianismo" no se levante ni cae con tales preguntas. "Mero cristianismo" denota esas verdades centrales de una cosmovisión cristiana. Si una persona cree que Dios existe y levantó a Jesús de entre los muertos como vindicación de su supuestas afirmaciones blasfemas personales, entonces uno debería ser cristiano, y el resto trata con detalles, un asunto de debate interno que se debe discutir únicamente entre los cristianos. Las preguntas acerca de la fiabilidad histórica de esos antiguos textos judíos no tienen relación directa con si Dios existe o si Jesús de Nazaret resucitó de entre los muertos. ¿Te puedes imaginar a cualquier historiador que niegue la historicidad de algún acontecimiento en los Evangelios debido a que, digamos, la historia de la Torre de Babel es un mito?

Además, estoy convencido de que tenemos razones realmente sólidas para pensar que el mero cristianismo es verdadero. Cuando debato con otros filósofos sobre la existencia de Dios, me encuentro pensando: "¡Guau, estos argumentos son realmente poderosos!" La credibilidad histórica de los Evangelios se encomienda cada vez más a los eruditos históricos. Simplemente me sorprende de que los hechos centrales que apoyan la inferencia a la resurrección de Jesús sean aceptados hoy por la gran mayoría de eruditos, y la debilidad de las objeciones de los eruditos escépticos es chocante.

Yo no me preocuparía con que eso nos deje dependiendo de un solo argumento para algo que haya sucedido hace 2.000 años. El intervalo de tiempo crucial es entre el momento de los acontecimientos originales y el momento en que fueron registrados, y no entre el momento en que fueron registrados y hoy. ¡Una buena evidencia no se convierte en mala simplemente por el pasar del tiempo! Siempre y cuando el lapso entre los acontecimientos y la documentación de ellos sea corto, no importa a cuánto tiempo en el pasado los acontecimientos y la documentación de ellos se remontan. Además, es engañoso decir que éste es sólo un argumento. Estamos hablando aquí de los registros históricos de la vida y enseñanzas de Jesús que son mucho mejores que lo que tenemos para muchas de las figuras más importantes de la antigüedad. Y, como observas, Jesús de Nazaret es una figura increíblemente convincente, por su propio derecho, a quien debemos tomar en serio en lugar de desechar. De hecho, quisiera virarte la mesa y decirte que estás poniendo una carga terriblemente pesada sobre un solo argumento, es decir, la cita de Jesús de esos relatos del Antiguo Testamento, como base para negar la credibilidad histórica de los Evangelios o la inferencia a la resurrección de Jesús.

El movimiento más importante que haces dialécticamente es explorar las implicaciones cristológicas de rechazar la historicidad de las narrativas problemáticas del Antiguo Testamento. Tu afirmación es que como Jesús evidentemente creía en la historicidad de esas historias, entonces si permitimos que esas narrativas no sean históricas, permitimos que Cristo se haya equivocado. Pero, ¿cuáles son las implicaciones cristológicas de eso?

¡Ahora bien, esa es una pregunta realmente buena que los teólogos necesitan explorar! ¿Tenía Jesús creencias falsas en su conciencia humana? ¿Él creía que el sol giraba alrededor de la Tierra? ¿Pensaba él que la Tierra estaba en el centro del universo? ¿Pensaba él que había estrellas más allá de las que podemos ver en la noche? No voy a hacer el intento de responder esas preguntas, pero creo que vale la pena plantearlas. ¿Se humilló Dios a un punto tan bajo en condescender y convertirse en un hombre que hasta asumió limitaciones cognitivas de que Jesús compartió falsas creencias, las cuales típicamente eran sostenidas por otros judíos ordinarios del primer siglo? Como tengo buenas razones para creer en su deidad, como expliqué anteriormente, yo admitiría que Jesús podía sostener creencias falsas (que en última instancia no importa) en vez de negar su divinidad. En vez de imponerle, a priori, nuestras concepciones de lo que implica la divinidad, necesitamos estar abiertos a aprender de los Evangelios lo que implicaba la encarnación.

En cualquier caso, hasta ahora no me siento presionado a ir tan lejos. Creo que los textos que citas para mostrar que Jesús tenía falsas creencias en el Antiguo Testamento son muy débiles. Marcos 10.6-9; Mateo 19.4-5, por ejemplo, son simplemente citas de Génesis sobre el propósito por el cual Dios creó al hombre y a la mujer. Hacer ese punto teológico no compromete, de ningún modo, la historicidad de la narrativa. Así que tu único ejemplo que tiene alguna fuerza es Lucas 17: 26-7, donde Jesús dice: "Tal como ocurrió en los días de Noé, así será también en los días del Hijo del Hombre. Comían, bebían, se casaban y se daban en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, y vino el diluvio y los destruyó a todos”. Pero esa referencia (como la referencia de parte de Jesús a Jonás) es compatible con citar una historia para hacer el punto de uno. Yo podría decirle a alguien "Así como Robinson Crusoe tenía a su hombre el viernes para ayudarlo, también yo tengo a mi esposa Jan para ayudarme", sin pensar en comprometerme con la historicidad de Robinson Crusoe.

Parece que tenemos ejemplos del Nuevo Testamento de este fenómeno. Por ejemplo, Judas 9 menciona un incidente en La Asunción de Moisés, una obra apócrifa que nunca fue parte del canon judío de la Escritura. 1 Timoteo 3:8 hace una comparación con un par de personajes nombrados en los tárgums [tárgum] judíos, los Manuscritos del Mar Muerto (Rollos del Qumrán) y en las tradiciones rabínicas, las cuales de igual manera nunca formaron parte del canon judío. Tales comparaciones no comprometen a los autores con la historicidad de los personajes o con los acontecimientos. Es posible que tengamos algo similar en Romanos 5.7, donde Pablo dice: "Porque a duras penas habrá alguien que muera por un justo, aunque tal vez alguno se atreva a morir por el bueno”. Simon Gathercole, un buen erudito del Nuevo Testamento, señala que Pablo está haciendo apelación a un tema común en la cultura greco-romana de alguien que se ofrece a morir voluntariamente en lugar de otro. El ejemplo más famoso en la antigüedad fue Alcestis en la obra de Eurípides con ese nombre, quien se ofreció morir en lugar de su marido, el rey Admeto. Por siglos, Alcestis fue celebrada y su nombre se encuentra incluso en epitafios de tumbas cristianas. Gathercole piensa que en Romano 5.7, Pablo puede estar pensando en Alcestis. Él dice, en efecto, "Alcestis estaba dispuesta a morir por su amado esposo, pero Cristo murió por sus enemigos". ¡Así que decir eso no comprometería a Pablo con la historicidad de esta figura puramente literaria!

De todos modos, ¿cómo podemos estar seguros de que las historias del Antiguo Testamento son falsas? Hace varios años, un artículo me llamó la atención sobre dos geofísicos seculares que creían que el diluvio de Noé podría haber sido un acontecimiento catastrófico local causado cuando los estrechos del Bósforo, que anteriormente estaban cerrados, se abrieron, provocando así que el mar Mediterráneo se desbordara y creara lo que hoy es el Mar Negro. A mí nunca me importó investigar porque, como expliqué anteriormente, no creo que eso tenga mucha importancia. Pero talvez algo de ese tipo realmente haya sucedido.

Por lo tanto, no estoy convencido de que las consecuencias cristológicas a las que temes sean tan drásticas como tú crees.

Ahora vayamos a tus preguntas específicas:

1. Si rechazo la Inerrancia de la Biblia, ¿qué uso tiene la Biblia para mí como cristiano? Para ser más específico, ¿qué referente epistemológico me queda para determinar si ciertos aspectos de mi potencial fe cristiana son verdaderos o falsos? No estoy proponiendo que rechaces la inerrancia de la Biblia, pero si lo hicieras, la Biblia sería útil para ti como una guía de verdades teológicas. Galileo sabiamente dijo que Dios nos dio las Escrituras para decirnos cómo ir al cielo y no cómo funcionan los cielos. La gran literatura del mundo nos muestra que las obras que no son históricas, como las obras de Shakespeare o las novelas de [Fiódor] Dostoievski o las fábulas de Esopo, tienen verdades importantes que enseñarnos. No se deduciría de la no historicidad de ciertas narrativas del Antiguo Testamento que el “repositorio para la verdad está, en efecto, fundamentalmente contaminado y, por lo tanto, no puede ser confiado”. Sabemos, por ejemplo, que los Evangelios son fuentes históricas creíbles, independientemente de lo que pienses de los primeros capítulos de Génesis. Sólo tienes que usar los buenos principios de interpretación bíblica y seguir hacia donde dirijan las evidencias, mientras que retienes una postura de humildad.

2. ¿Cuál es su posición sobre los otros relatos en Génesis además del relato de la creación? Como ya expliqué, no sé qué pensar. Así como tú, he tenido dificultad con algunos de ellos. Acepto la historicidad como un tipo de posición por defecto. Pero tengo una mente abierta. Puedo vivir con la incertidumbre, confiado en la verdad del mero cristianismo.

- William Lane Craig